Ciudad subterránea de Derinkuyu

Derinkuyu , ubicada en Capadocia en Turquía, es una ciudad subterránea que ha cautivado la imaginación de los visitantes durante siglos. Es un complejo subterráneo único, excavado en la blanda roca volcánica de la región. La ciudad fue construida por los antiguos frigios, que vivieron en la zona durante el siglo VIII a.

La ciudad subterránea de Derinkuyu es un complejo de varios niveles, con un estimado de 8 niveles que alcanzan una profundidad de casi 60 metros. Cada nivel consta de una red de túneles, cámaras, viviendas, almacenes, establos, iglesias y otras áreas para las actividades cotidianas, como cocinar y dormir. La ciudad también cuenta con un impresionante sistema de conductos de ventilación y pasillos, que permiten la circulación del aire y una ruta de escape en caso de peligro.

La ciudad fue diseñada para ser autosuficiente, con sus propios pozos de agua, cocinas y áreas de almacenamiento. También fue refugio de invasores, ya que la entrada a la ciudad podía cerrarse y sellarse con grandes piedras. Además, las murallas de la ciudad eran lo suficientemente gruesas para resistir el fuego de los cañones.

La sala más grande del complejo es la Iglesia de San Bernabé, que fue construida en el siglo XI. Se cree que esta sala fue utilizada como lugar de culto por los primeros cristianos que vivían en la ciudad.

Derinkuyu es un sitio arqueológico importante y ha sido un área protegida desde la década de 1960. La ciudad está abierta a los visitantes y hay recorridos disponibles para ayudar a los visitantes a explorar sus muchos niveles y cámaras. Visitar Derinkuyu es un viaje en el tiempo y la oportunidad de explorar una ciudad que se ha mantenido prácticamente sin cambios durante siglos.

La ciudad es una mirada fascinante al pasado y un recordatorio del ingenio de sus antiguos habitantes. Los túneles y las cámaras ofrecen una idea de cómo vivían los antiguos frigios y cómo se protegían de los invasores. Es una experiencia única y cautivadora, que seguramente dejará una impresión duradera en los visitantes.